martes, 28 de agosto de 2012


Algo nos atrapó. Yo me aferré a las noches en las que me mirabas a los ojos, y me decías que me amabas. ¿Estabas bromeando, verdad? porque eso parecía. Se nos vino todo abajo, no me sentía bienvenida cuando hablábamos. Amor, ¿qué nos ha pasado? por favor dímelo, porque hace un segundo estaba todo perfecto, y ahora te has ido tan rápido que ni si quiera me ha dado tiempo a despedirme.
Miro el teléfono, esperando una respuesta tuya, una respuesta que nunca llega. Y entonces, me siento tan mal, que ya no puedo sentir nada en absoluto. Retrocedo el tiempo, y recuerdo cuando tu me decías, 'por siempre y para siempre'.

¿Acaso me pasé de la ralla? Tal vez hice algo que hizo que huyeras y te escondieras de mis brazos.
Te miré a los ojos, por un instante creí que te conocía. Ahora no estoy tan segura. Y entonces vuelvo a retroceder el tiempo, y recuerdo cuando tu me decías, 'por siempre y para siempre'. Pero no hablabas enserio cuando lo decías.

Vuelve, amor, vuelve. Por favor vuelve. ¿Ya te has olvidado de todo? Fueron 21 días. Parecías feliz a mi lado, ¿que ha pasado?...


En esta semana he podido aprender más que en toda mi vida.
He aprendido que los 'para siempre' tienen fecha de caducidad. Que todo en un momento de nuestra vida acaba. Que no vale la pena llorar por alguien que no merece ni que pronuncie su nombre. Que de los errores se aprende.Que por muchas hostias que te de la vida no hay que hundirse. Que hay que aprender a sonreír a los problemas. Que hay que olvidar a las personas, pero no a los momentos que viviste con ellas. Que no hay que dejar de lado todos esos recuerdos de los buenos momentos vividos, ya que son los que te hacen persona,  y forman parte de ti. Que, ¿porque olvidar? Al renunciar a esos recuerdos que viví, estoy renunciando a una parte de mi pasado, a una parte de mi. Puede que haya acabado odiando a esa persona con la que viví esos momentos, o simplemente haya perdido el contacto con esa persona, pero, ¿acaso no lo pasé bien? No hay que olvidar esos recuerdos, porque fui feliz en esos momentos, porque volveré a serlo. Y mi vida me llenará de muchos otros nuevos recuerdos, tan buenos o incluso mejores que los anteriores.


Podría decir que no recuerdo sus gestos ni sus formas. Tampoco su manera de reír, ni su sentido del humor. Podría fingir que he olvidado el modo en el que hablaba cuando estaba nervioso, y la dulzura de sus manos, incluso que apenas recuerdo su tacto y su olor. Podría acompañar mis palabras con una sonrisa sincera, y hablar del rumbo que tomó mi vida más tarde sin que tú apreciaras en mi expresión un solo gesto de falsedad. Pero, ¿sabes? mentirte sería mentirme, y mentirse a uno mismo es una vieja forma de intentar ocultar nuestro orgullo herido.
No sé bien que motivo me ha llevado a escribir estas líneas. Puede que con ellas intente deshacerme de la obligación de plasmar en un papel, la historia de un milagro que tuve la suerte de vivir. Una maravilla que tenía rostro y voz, cuyo recuerdo me acompaña día a día.
Nunca podré afirmar que él fuese perfecto bajo todas las miradas, pero si algo tengo claro sobre él, es que era capaz de romper cualquier esquema. Incluso los míos. Tan fuerte que me veía yo, y ahora dependo de un simple mortal.


Para que mentir, fue aquel día cuando descubrí que las lágrimas se derraman. No se caen, ni se tiran, ni se vierten. Se derraman. Como si se hubieran estado acumulando a lo largo de los años en las vasijas invisibles del querer. Como si cada día feliz que hubiera pasado con él, cada momento especial, hubiera guardado una a una las lágrimas que derramaría de golpe un día como aquel.
Tal vez, en cada momento de felicidad guardemos una lágrima en nuestro interior, para así, poder derramar una por una las lágrimas en los momentos de soledad y tristeza y hacernos  recordar que cada lágrima que recorre nuestras mejillas son momentos que fueron de felicidad absoluta.

Que sé como agacha la cabeza, levanta la mirada y se muerde el labio superior. Que conozco su voz en formato susurro, y formato gemido, y en formato secreto. Que me sé sus cicatrices, y el sitio que le tienes que tocar en el este de su pie izquierdo para conseguir que se ría, y me sé lo de sus rodillas, y la forma que rozar las cuerdas de una guitarra. Que yo también he memorizado su número de teléfono, pero también el numero de sus escalones, y el numero de veces que afina las cuerdas antes de ahorcarse por bulerías. Que no sólo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores, y yo sí que no tengo cojones a decirle que no a nada, porque tengo más deudas con su espalda de las que nadie tendrá jamás con la luna.


Dijiste que te olvidara, que no pensara más en ti, que me buscara otro entretenimiento, no hizo falta hablar, fue con gestos. Asimilaste que yo pudiera hacerlo. Me pediste ponerle un punto y final, me pediste no hacer más dificiles las cosas. ¿Esque estamos locos? ¿Por qué nos impedimos querernos? Me pregunto si alguna vez pasé por tu mente.. A mi me pasa todo el tiempo.

Me muero por suplicarte, que no te vayas mi vida.. me muero por escucharte decir las cosas que nunca digas mas me callo & te marchas.. mantengo la esperanza, de ser capaz algún día  de no esconder las heridas que me duelen al pensar que te voy queriendo cada día un poco más.. ¿cuanto tiempo vamos a esperar? me muero por abrazarte, & que me abraces tan fuerte.. me muero por divertirte, & que me beses cuando despierte acomodada en tu pecho.. hasta que el sol aparezca; me voy perdiendo en tu aroma, me voy perdiendo en tus labios que se acercan susurrando, palabras que llegan a este pobre corazón.. voy sintiendo el fuego en mi interior..

¿Sabes? Ella siempre lo ha hecho,siempre te ha querido.Verás..Ella siempre ha callado,pero solo para escucharte.Ha sellado sus labios,ha sellado su corazón,solo para no perderlo,le volvías loca.. recuérdalo. Ella siempre escuchó tu silencio y adoró tus sonrisas..buscó tus besos y guardaba tus abrazos.Nunca pidió nada más.Y de eso es de lo que vengo a hablarte..No se puede pedir más cuando es más de lo que quieres lo que se tiene..Eras imprescindible para ella,y tú..tú no te dabas cuenta.Me gustaba escucharla,sólo cuando era feliz...Podía tirarse,unos..¿15 minutos?Sólo hablando de el brillo que tiene tu sonrisa,y quizás unos 20..del color de tus ojos.No sé si me explico.Era raro,pero repito,me encantaba escucharla.¿Por qué?Porque era realmente precioso.Más bonito que todas esas películas de princesas,o esas del siglo 21 con las que llora todo el mundo.Juro que era mucho más bonito que todo eso..Increíble.Totalmente increíble lo que le hacías sentir.Y bueno..lo único que pedía era que respiraras,sí,cierto..y tú lo sigues haciendo,y por eso estoy aquí..ella ya no lo hace, ni sonrisas ni mierdas.¿Quieres saber algo?Conozco a la chica con la que compartes tus sueños ahora,y ¿quieres saber algo más?Bésala,por favor,bésala cuando ella esté delante.Sé que suena raro,pero..repito: bésala,y si ella se da la vuelta..es que eres el amor de su vida.Entonces podrás darte cuenta de que si tú me dices que la echas de menos,yo te diré cuanto ha llorado durante todo este tiempo.
© its now or never
Maira Gall